lunes, 20 de octubre de 2014

Es esto, porque me funciona.

Tengo un amigo "nuevo", es decir, recientemente entablamos amistad. Es el hermano de mi amiga más cercana y, por lo mismo, he pasado tiempo con él. En ese tiempo, he descubierto que es un gran hombre, lo cual me lleva (¿a todos?) a crear una lista de cosas o situaciones que "un hombre como él debería tener". En el caso a platicar hoy, es su noviazgo.

El chico (28 años), lleva 3 años de novio con una chica (27) y, para ser absolutamente honesta, si se vieran menos enamorados, podría jurar que llevan varios años de casados con muchos hijos (esa relación ya de hastío y cansancio, donde la otra persona se convierte en el recordatorio de todo lo que no hiciste o pudiste lograr, sacrificaste, perdiste, etc.). La chica terminó la licenciatura y lleva tres años haciendo la tesis (no quiero ni pensar de qué tamaño será la tesis, si le toma tres años de tiempo completo), no trabaja ni parece tener grandes planes a futuro. El muchacho, terminó la carrera en tiempo y forma, tiene un buen trabajo y está desarrollando un proyecto muy interesante y grande, que van (ya explicaré el plural) a hacer en la península de Yucatán, y para el cual se muda en enero.

El plural, van, quiere decir que él, la novia y la familia de la novia (ja, suena a película gringa).

Demonios, creo que ya perdí el hilo de mi escritura. El asunto era, sí, que él lleva tres años con una chica con la que tiene un plan de trabajo a largo plazo, y que no se ve ni remotamente enamorado de ella (lo peor, ella de él tampoco). La familia de él, y la amiga de la hermana (yo) estamos un poco preocupados por esta situación (preocupados aquí significa: somos unos metiches que creemos que hay espacio para nuestra opinión, en una relación que no es nuestra), porque creemos que él debería estar con una mujer que lo hiciera (se hicieran) absolutamente felices, que se vieran enamorados, estuvieran enculados, no pudieran dejar de coger y se sonrieran el uno al otro cuando se mirasen. Porque hay cosas que se sienten y parece que "están mal", que él prefiera acariciar o apapachar a una mujer que no es la suya, con la suya al lado, que pase los fines de semana con otras personas, que tenga sus "amantes" (algo así, aunque no nos conste que sea con esas palabras, pero vamos, esto se ve a leguas), no suena a una relación feliz. Y uno, que es metiche, muere porque él se dé cuenta de esto y la deje para ir en busca de quien sí llene todas nuestras (las de los metiches) expectativas.

El sábado, en un arranque de imprudencia de mi parte, se lo dije, que debería estar con una chica que lo tuviera enamorado, enculado, que lo hiciera sonreír de formas pendejas y absurdas... y él contestó que estaba en esa relación porque le funcionaba, su relación pasada terminó en tragedia y él estaba más que enamorado y comprometido, y por eso había decidido buscar una relación que no lo hiciera perder la cabeza y que resultara sencilla. La relación que tenía actualmente era así, funcional. Un rato después me preguntó si yo tenía una relación sana y feliz, y entonces sí me dejó pensando, porque en realidad yo tampoco la tengo (no bajo los cánones de "sano siempre y feliz siempre"), mi relación a veces parece montaña rusa. PERO, estoy en ella porque me funciona, porque obtengo algo de ella. Igual que él.

Oh, la ironía. Ahí estaba yo juzgando a alguien porque creo que merece una súper mujer, y dejé de lado que esta es la súper mujer porque le da lo que él necesita/quiere/busca/desea en este momento; que no es víctima de la situación y que nada de lo que sucede lo somete más de lo que él lo permite. Sí, sí, estoy de acuerdo, cuando uno "sabe" que existe el inconsciente, la pulsión de muerte y el goce, no puedes pasar por alto que tal vez lo que él obtiene no sea lo que desea, sino una forma de gozar (léase sufrir, masoquismo). De todas formas, y es justo a donde quiero llegar con esto, me parece admirable que tenga los huevos y el temple de afirmar que está ahí porque lo decidió y que sea capaz de sostenerse en ese lugar, con todo y las consecuencias que esta decisión traiga consigo.

Así que yo, con mi pedantería de metiche-amiga, me he quedado sin palabras. Tal vez, quepa una disculpa por haber opinado y juzgado donde no me corresponde... Pero es que es tan difícil separar lo que deseas para quien quieres, de lo que ellos escogen para sí.

2 comentarios:

  1. Bueno, por lo menos lo "metiche" te sirvió para hacer auto-análisis. Jajajaja. Es cierto que lo que desde fuera puede no parecer perfecto, desde dentro es lo ideal para nosotros. Un besote!!!

    ResponderEliminar

¿Soy sólo yo?